martes, 11 de octubre de 2011

450 años entre nosotros.



     Nunca se nos borrará de la mente, a todos los que allí estuvimos, aquella jornada histórica del día 1 de octubre de 2011. 

     Comenzaba la ajetreada mañana con el Bando anunciador de la Banda Municipal de Música de Palos de la Frontera. Nos removía el corazón aquellos sones ordinarios a base es Estrella Sublime, Corpus Christi, ect. Majestuosa la Banda recorrió todas las calles por la que horas más tarde pasaría el Stmo. Cristo.

     Cinco y media de la tarde, se abría la puerta de los novios de la parroquia para el recibimiento oficial de las Hermandades invitadas, Milagros y Rocío de Palos, Hermandad del Cristo de la Sangre de Zalamea, Hermandades del Sto.entierro y Cristo de la Sangre de Gibraleón, Estudiantes y Redención de Huelva y Vera Cruz de Moguer.

     A la seis y cuarto la imagen del Stmo. Cristo de la Sangre hizo su salida de la parroquia, sones de fondo del Coro polifónico "Euterpe" de Cádiz. Un cuarto de hora después, dio comienzo el solemne pontifical presidido por el Sr. Obispo de Huelva. La fachada y el campanario de la Iglesia y los tonos celestes y ocres del cielo, no podían ser mejor fondo para la Eucaristía. El silencio se hizo presente en aquella plaza, hasta las cigüeñas callaron, y una multitud que cubría prácticamente la totalidad de la calle se disponía atentamente a revivir el misterio de la redención.


     Al finalizar la misa, se procedió a bendecir el retablo cerámico de D. Carmelo del Toro y la plaza donde se ubica, en pleno casco histórico de nuestra localidad.


     Una vez finalizado el acto de la bendición dio comienzo, cantando al amor de los amores, la Procesión extraordinaria por las calles de la localidad. 

     A las nueve y media la comitiva llegó a la casa de María, donde cuantas veces fueron necesarias la imagen del Cristo fue acogida. Allí se bendijo otro azulejo, del mismo autor que el anterior, que recordará a futuras generaciones que aquella humilde casa fue -por el escogida- para ser morada del Rey de Reyes. 


      Al paso por la puerta del Ayuntamiento de la procesión fueron despedidas las Hermandades invitadas, y la corporación municipal recibió a la Hermandad en el corazón de nuestro pueblo. 


     Por cuatro horas nuestro amantísimo Titular se hizo presente en nuestro pueblo con sones cigarreros. A las doce en punto de la noche sonó la Marcha real en la puerta de los novios, dando así por finalizada la procesión extraordinaria. 
  

      Quedó este día escrito con letras de oro en la historia de esta humilde Hermandad y en la memoria de cuantos allí estuvimos presentes y fuimos testigos de tan grandioso acontecimiento.


Fotos de:  Sergio Rosillo y huelva24.com